ClàssicsWeb, el teu espai

Almanac

Cerca de notícies

Paraules:
Tema:
Inici: Escollir data inici
Fí: Escollir data fi
Ajuda
Verso

NOTÍCIA

Neville Marriner

20/6/2011 |

 

Ha sido una buena cosecha la de 1924 para la música. Fue el año del estreno de “Wozzeck” y el año igualmente en que nacieron el tenor Carlo Bergonzi y el compositor Henry Mancini. También vino al mundo Neville Marriner, elevado a Sir por su majestad (1985) y convertido en referencia del mejor proselitismo para algunas generaciones de melómanos.

 

Me encuentro entre los admiradores del maestro. Tanto, que mi propia juventud de aficionado hubiera sido inconcebible sin la Academia de Saint-Martin in de Fields y el sello Philips. Especialmente, claro, en el repertorio barroco y clásico.

 

Ya sabemos que la corriente historicista desplazó el protagonismo de los músicos londinenses. También es indiscutible que varios de sus compatriotas –Gardiner, Pinnock, Hogwood- fueron más lejos que Marriner en el interés de las propuestas y de los hallazgos.

Pero me gusta de vez en cuando poner los discos de Marriner. Me interesa la humanidad con que retrata a Mozart. Y hasta me atraen proyectos tan insólitos y dispares como sus grabaciones de “El barbero de Sevilla” de Rossini y el “Oberto” de Verdi.

Marriner ha sobrevivido. Puede que no desde una posición de liderazgo en el mercado de las grandes orquestas, pero sí desde de una posición envidiada y envidiable: Marriner ha demostrado que el podio no es un símbolo de poder, sino un espacio de libertad.

Recuerdo haberlo entrevistado en varias ocasiones. También recuerdo haberme peleado con mis superiores para reivindicarlo. No les sonaba el nombre. Así es que la única forma de convencerlos consistía en decir que había compuesto la banda sonora de “Amadeus”.

No era verdad, claro. Lo que sí era cierto es que Milos Forman recurrió a Marriner como asesor y que la música de la película provenía del "templo" Saint Martin in the Fields. De hecho, el maestro británico aprovechó el bicentenario de la muerte de Mozart -1991- para acometer la integral de las sinfonías y para grabar todas las óperas de referencia.

“Mozart”, me decía entonces, “es la apoteosis del estilo y del contenido”. No he encontrado mejor definición del maestro austriaco. No voy a encontrarla.


Blog de pecho

Catclàssics, música clàssica de Catalunya a internet