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Enquesta

Dominique Meyer, nuevo director de la Ópera de Viena, se presenta al público

6/9/2010 |

 

"He sido recibido muy cálidamente por el público", dijo a la agencia APA el músico francés, que ha dirigido la Ópera de París, entre otros teatros líricos

 

El nuevo director de la Ópera de Viena, Dominique Meyer, se presentó hoy en la capital austríaca en una jornada de puertas abiertas al público general y saludó a decenas de visitantes en la escalinata de esta prestigiosa casa.

Casi 4.000 personas entraron en la "Casa del Ring" y escudriñaron rincones inaccesibles los demás días a extraños, desde los vestuarios hasta los mecanismos hidráulicos que mueven el escenario principal, pasando por el ensayo de un ballet. La entrada era gratis pero debía obtenerse por adelantado en las dependencias de la "Staatsoper" desde el pasado 4 de agosto.

"He sido recibido muy cálidamente por el público", dijo a la agencia APA el músico francés, que ha dirigido la Ópera de París, entre otros teatros líricos. Mayer compartirá el gobierno de la ópera vienesa junto con Franz Welser-Möst, que se ocupará de la dirección musical. Algunos visitantes, como el aficionado Wolfgang Gottschly, expresaron hoy su esperanza de que Meyer sea algo más reservado que su antecesor en el cargo durante 18 años, Ion Holender, quien se caracterizó por su extrovertido estilo y frecuente presencia en los medios de comunicación.

Para los aficionados a los efectos especiales, hubo hoy una demostración de la máquina de hacer viento y niebla, mientras en otras salas se pudieron presenciar máscaras, pelucas y vestidos y otros accesorios que emplean los cantantes. "El día de puertas abiertas" se celebró en la víspera de la apertura de la temporada y del estreno de una nueva puesta en escena de "Tannhäuser" de Richard Wagner, que dirigirá Welser-Möst, seguida el lunes de "La Boheme" de Puccini.

Entre los retos que ve Meyer para dirigir la "Casa del Ring", comentó a la revista "Falter" la coordinación simultánea de 300 funciones con 50 óperas distintas y los insuficientes ensayos, que deben combinarse con la renovación del repertorio, todo ello procurando mantener el máximo aforo.

Meyer también se preocupa por lograr cosas más mundanas como un nuevo convenio colectivo para la orquesta, un nuevo escenario para los ensayos y una nueva normativa para los solistas invitados, que les permita llegar antes a Viena para poder ir a más ensayos. "No digo que todo esto deba hacerse enseguida, pero tengo objetivos y tengo paciencia. Viena no se hizo en un día", apostilló el músico francés respecto a su futura labor en la "Staatsoper".

La Vanguardia