7/8/2010 |
¿Quién dijo que la música del verano es de chiringuito y festival pop?
Sónar, Benicàssim o Rock&Rio son ya historia. Si en la primera parte del verano dominan los festivales poperos para público de masas, en agosto llega la hora de degustar música clásica en parajes y ambientes más recogidos. Como los precedentes, también son festivales de música indie, si se entiende por indie lo voluntarioso, escogido y concebido entre amigos. A continuación, una guía para degustar ese momento mágico del atardecer –notablemente descrito por Kazuo Ishiguro en su último libro, Nocturnos– en el que pianos, violines o voces privilegiadas dan la bienvenida a la noche. Siempre en exquisitos escenarios con toda la magia del agosto junto al Mediterráneo.
Cuatro perlas para no perderse
JOSÉ MANUEL ZAPATA
El tenor actúa esta noche (22 h) en el castillo de Santa Florentina, con tangos y arias de ópera
MATTHIAS GOERNE
Por el claustro de Santa Maria de Vilabertran (en la foto) se paseará el barítono el día 13
MARÍA BAYO
Doblete de la soprano por tierras catalanas: el 14 actúa en El Vendrell y el 20 cierra Torroella
JORDI SAVALL
El violagambista trae su programa sobre la viola celta al auditorio Pau Casals los días 9 y 10
TORROELLA DE MONTGRÍ
El esplendor gótico
Descansar la mirada sobre las Illes Medes, grato aperitivo para degustar más tarde cualquiera de los conciertos que hasta el 20 de agosto tendrán lugar en la pequeña catedral gótica de Torroella de Montgrí. Entre los placeres que sirven para abrir boca está el de dejarse caer a media tarde por la plaza porticada de Torroella, relajarse visitando la Fundació Mascort –expone mobiliario antiguo– o la sala de instrumentos de cobla en el Museu de la Mediterrània, en la Casa Quintana. Más tarde, pasearse por el rehabilitado Palau del Mirador, lugar éste en el que veraneaban los reyes de la Corona d'Aragó en tiempos en que la zona gozaba de privilegios de mercado y vivía una situación floreciente como para emprender la construcción de esa nave gótica que hoy sirve de escenario para la clásica.
Si se decide gozar hoy mismo de este bálsamo, la audición será algo curiosa: Sarband, un grupo de músicos turcos residentes en Alemania abordan La Pasión Árabe según Johann Sebastian Bach. Y lo que sigue en Torroella, entre otras cosas, es el piano: el día 10, Éric Le Sage, con Beethoven, Schumann y una obra de estreno de y con Albert Guinovart (a cuatro manos); el 12 los hermanos Capuçon; el 15 Rudolf Buchbinder; el 18 el pianista Ronald Brautigam, y el 19 Joaquín Achúcarro. Y un cierre usual con la voz de Maria Bayo.
FEST. SANTA FLORENTINA
Refrescante y ajardinado
En Santa Florentina (Canet de Mar), a tiro de piedra de Llavaneres, del Vallès o de Barcelona –incluso hay quien efectúa una escapada desde la Costa Brava– están pensando en adelantar el horario de apertura a juzgar por las colas que se forman a las ocho de la tarde frente al castillo, paraje incomparable, dos horas antes de que comience el concierto. La oferta de canapés en ese jardín espectacularmente iluminado, a dos kilómetros del mar, parece tan tentadora como la Sala dels Miralls del Gran Teatre del Liceu. Aún más si el repertorio va a ser tan refrescante como el de hoy: Noche de amores rotos: de Roma a Buenos Aires, una auténtica velada de tangos y arias de ópera con José Manuel Zapata, acompañado al piano por Ricardo Estrada. Santa Florentina sigue en sus pasos habituales, y presenta el 12 al ganador del Maria Canals 2009, con Chopin, el 14, a I Musici di Vivaldi, y el 19, a Claudi Arimany, virtuoso flautista, cerrando el 21 con una gala de tenores.
FEST. PAU CASALS, EL VENDRELL
Voluntades y orquesta en auge
El Vendrell dispone en estos momentos de una infraestructura musical excepcional, ya que acaba de inaugurar su nuevo edificio el Conservatorio, que suma al patrimonio Casals y al Auditori, donde hoy presenta la Camerata XXI. La orquesta, fundada hace poco más de un lustro para llenar el hueco orquestal en Tarragona, va dando pasos muy positivos.. "La trayectoria es fabulosa –reconoce su director, el violinista alemán Tobias Gossman–, empezamos como pequeña orquesta de cuerda y hemos duplicado tanto la actividad como el tamaño de la orquesta".
Hoy, esa sinfónica con temporada fija y giras que incluyen Japón, disfruta de la proximidad con el público que le garantiza el Auditori Pau Casals. Una curiosidad en el concierto de hoy con un programa comprometido (la 5ª de Schubert) y atractivo, además, por el Concierto de Clarinete de Mozart que hoy sonará con un instrumento made in Camerata XXI. El clarinetista Óscar Argüelles se ha construido un clarinete rudimentario, un corno di bassetto, según un dibujo que data de tiempos de Mozart hallado en San Petersburgo, lo que dificulta aún más su interpretación. "Pierde potencia, pero suena muy dulce", explica Gossman. Otras citas en agosto: Jordi Savall trae su programa de viola celta los días 9 y 10, y el 26 llega el fantástico Trío Guarneri, una ocasión para escuchar de cerca este gran conjunto checo internacional.
SCHUBERTÍADA DE VILABERTRAN
La fidelidad de grandes voces
Llegando a Vilabertran, los restaurantes de Mollet de Peralada, o la ruta de Vilajuïga, Pau y Palau- saverdera. También el románico de Sant Pere de Rodes con sus vistas sobre la Plana de l'Empordà, o el atardecer sobre Cap de Creus. La proximidad de Figueres y la oportunidad de visitar el Museu Dalí. "Un festival es básicamente un ambiente, y en este caso, un ambiente de introspección, poético, en el que sale esa gente con su maravillosa voz a cantar poesías de Goethe", señala Jordi Roch, alma máter de la Schubertíada. "L'Empordà es una tierra mágica, muy adecuada para una Schubertíada, pues merece ese punto de religiosidad, de la música del lied en la intimidad. Y la Iglesia-Colegiata de Santa María (en la foto) te hace sentir recogido, te da paz", matiza. Comienza el próximo viernes, con el barítono Matthias Goerne, uno de esos fieles a Vilabertran entre los que se cuentan la mezzo Angelika Kirchschlager (día 24) y la soprano Julian Banse (28). El 20, el tenor Christoph Pregardien, y una interesante novedad para el 21, el pianista Sebastian Knauer. El Quartet Casals, también asiduos, se harán acompañar en esta ocasión –y para un delicado Bocherini– por el violonchelista Eckhard Runge. Y otra pieza que luce: la soprano Mojca Erdman, ya el 4 de septiembre, antes de concluir el día 10 con la orquesta de cámara de la Schubertíada. Ojo, esta vez en el teatro El Jardí de Figueres. "Una lástima de acústica, con lo bien que se oye todo en la capilla de Santa María...", se lamenta Roch.
MAS I MAS EN LA PEDRERA
El antídoto en plena urbe
A todo esto, Barcelona duerme en agosto la increíble siesta cultural –al menos en la música clásica– aunque quedan rincones por rescatar gracias al festival Mas i Mas que organiza este mes en La Pedrera, unos 21 pequeños conciertos de alrededor de media hora. Repertorio cortesano y galante, que va de la viola da gamba al piano español –con Alfredo Armero–, o modalidades de Trío. Y programas de diseño con la firma de Xavier Chavarria.
MARICEL CHAVARRÍA
La Vanguardia