5/4/2008 |
Homenaje a Puccini en el 150 aniversario de su nacimiento.
El Palau de les Arts presenta el próximo martes el último título de su temporada de ópera, antes de embarcarse en el Festival de Mediterráneo: Madama Butterfly de Giacomo Puccini, con la que prosigue su homenaje al compositor de Lucca en el 150 aniversario de su nacimiento, iniciado el pasado 21 de febrero con una magnífica gala lírica, y que culminará con una nueva producción de Turandot dirigida musicalmente por Zubin Mehta. Esta ópera, con libreto de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica basado en una obra teatral de David Belasco (quien a su vez se inspiró en el libro de Pierre Loti Madame Chrysanthme), fue estrenada el 17 de febrero de 1904 en La Scala de Milán, obteniendo muy mala aceptación por parte del público y la crítica. Tras ser sometida a una profunda revisión, la ópera fue nuevamente presentada en el Teatro Grande de Brescia el 28 de mayo del mismo año, alcanzando un éxito triunfal.
La historia de la infortunada geisha seducida por el capitán norteamericano, considerada por su autor “la partitura más sentida y la más sugestiva que jamás haya podido concebir”, llegará en la producción de La Scala de Milán, debida al director escénico japonés Keita Asari, un trabajo lleno de poética simbología que fue dirigido en su estreno hace ya algunos años por el mismo maestro que se responsabilizará de las funciones valencianas, Lorin Maazel, a quien cuadran muy bien los pentagramas puccinianos, y que sin duda sabrá otorgar todo el color y el sentido del drama a esta espléndida ópera, al frente de una Orquesta de la Comunidad Valenciana que tendrá una nueva ocasión de demostrar sus extraordinarias cualidades, en unos pentagramas particularmente pensados para el lucimiento instrumental.
De Elena Nebera a Marina Rodríguez-Cusí
El papel titular ha sido encomendado a la soprano rusa Elena Nebera (que estará sobre el escenario los días 8, 11 y 14). Las tres últimas funciones (17, 20 y 25 de abril) las interpretará la soprano china Hui He, una de las más interesantes voces lírico-spinto de nuestros días. El papel de Pinkerton, uno de los más ingratos del repertorio tenorio, estará incorporado por el italiano Maximiliano Pisapia, que destacado por su timbre juvenil y su belleza vocal en roles como el Rodolfo de La Bohème o Ricardo en Un ballo in maschera. En cuanto al personaje de la fiel sirvienta Suzuki, estará incorporado por una mezzosoprano de absoluta garantía, Marina Rodríguez-Cusí, que ha logrado hacer toda una creación del mismo.
Rafael BANÚS
El Cultural