1/5/2004 |
Una de las obras culminantes del repertorio religioso de la transición del XVI al XVII pertenece al genial compositor de Cremona Claudio Monterverdi. Nos referimos a sus Vespro de la Beata Vergine. Impresas en 1610, configuran una obra de grandes dimensiones que ha alcanzado indudable popularidad. En los catorce fragmentos de los que cuenta, Monteverdi acude al stil nuovo polifónico –del que es gran precursor– en contraposición al stilo antico palestriniano, pero sin permitir que se introduzcan elementos profanos en la composición. El músico utiliza el contraste entre la grandiosidad de los salmos y el canto íntimo de las antífonas. Il Concerto Italiano de Rinaldo Alessandrini llega al flamante y recién inaugurado Auditorio de Castellón para interpretarlas este sábado. El excelente conjunto del maestro romano también visitará el día 3 la Sociedad Filarmónica de Bilbao y el 5 el Auditorio en el ciclo de la Complutense.
El Cultural