17/4/2004 |
No cabe duda que Joan Guinjoan es uno de los compositores más reconocidos de Cataluña. En los últimos tiempos, tras superar una durísima enfermedad, ha vuelto con fuerza a la creación. Además está viviendo un momento de euforia tras el estreno de su suite Archipiélago que llevó a cabo el Festival de Canarias el pasado año y el Teatro del Liceo ha anunciado que, por fin, el próximo mes de noviembre presentará su ópera Gaudí, que teóricamente hubiera debido coincidir con el centenario del arquitecto catalán. La obra contará con dirección de escena de Manuel Huerga y musical de Josep Pons. Sin embargo, el interés por el ilustre compositor viene en esta ocasión porque la Orquesta Ciudad de Barcelona dará a conocer, mañana mismo, su Concierto de clarinete, una obra encargo de la formación catalana cuya lectura corresponderá al titular, Ernest Martínez Izquierdo, junto al excelente instrumentista Joan Enric Lluna. El resto del programa incluye Javelin de Michael Torke, una composición de 1994, y la cantata Alexander Nevski de Prokofiev, con la mezzo Ewa Podles y el Orfeó Català. No será, por cierto, el único estreno, ya que la Orquesta de Valencia presentará mañana en el Palau de Valencia el Concierto para violín y orquesta de Eduardo Montesinos (1945) que se repetirá en Ribarroja el sábado. Como solista, un artista de fuste, Pierre Amoyal. Al frente, estará el joven maestro Álvaro Albiach. El resto del programa incluye obras de Mendelssohn y Gershwin.
El Cultural