Rolando Villazón acaba de publicar un nuevo disco de arias. Si su último registro estuvo dedicado a Verdi, ahora le ha tocado el turno a Mozart, compositor que ocupará prácticamente su agenda en 2014 (encarnará a Don Ottavio en dos producciones, una de ellas a las órdenes de Barenboim en la Staatsoper de Berlín; mientras la otra tendrá lugar en Viena. También interpretará a Ferrando, en la Scala de Milán), y que, como el mismo confiesa, se ha convertido en una obsesión.

El registro mozartiano, realizado con el sello DG, es una colección de arias de concierto para tenor que son raramente grabadas. En ellas está arropado por la Orquesta Sinfónica de Londres, bajo la batura de Antonio Pappano.

Rebuscando entre partituras

Villazón recuerda que la idea surgió cuando buscaba en una tienda de Munich una partitura de «Don Giovanni» y se encontró con una edición de arias de concierto para tenor de Mozart. «Me quedé cautivado y supe desde ese mismo momento que quería que esto fuese mi próximo proyecto discográfico», afirma Villazón. Encontró a un colaborador entusiasta en el director Antonio Pappano, y juntos seleccionaron diez arias para tenor y orquesta para incluirlas en el disco, que abarcan toda la carrera de Mozart y recorren un amplio espectro emocional, desde el patetismo y la tragedia hasta la alegría y la comedia.

«Es como si hubiera desvelado todo un mundo nuevo», dice Villazón del disco. «Ningún compositor me habla directamente como Mozart. Es como un querido compañero», asegura el tenor en un comunicado de la casa discográfica, aunque también se ha tenido que enfrentar los «retos técnicos» de estas partituras «tanto por las notas altas como por la interpretación». El esfuerzo ha merecido la pena porque al mismo tiempo le han permitido conocer la «evolución» del compositor, «desde su juventud a su madurez» Villazón también destaca, en un vídeo promocional, el sentido del humor de Mozart. «Era como un payaso, entendido como un cumplido. Un payaso capaz de hacernos soñar. Para mí es extraordinario cantar, trabajar con su música», confiesa con el entusiasmo que le caracteriza.

Esta no será la única grabación mozartiana de Villazón este año. En julio proseguirá su colaboración con Yannick Nézet-Séguin para una grabación de «El rapto en el serrallo». Será la tercera de las siete óperas planificadas para el ciclo de las óperas de madurez de Mozart que ya ha empezado a publicar Deutsche Grammophon. Villazón canta los papeles de tenor principales y es el coasesor artístico de todo el proyecto, patrocinado por ROLEX. «Se trata de mi proyecto artístico más ambicioso hasta la fecha», asegura el tenor. «¡Hasta ahora no había estado nunca tan obsesionado con una pasión por un compositor!»