Sir Simon Rattle y la Filarmónica de Berlín han llegado a España con la agenda muy apretada. En seis días ofrecerán seis conciertos en tres espacios diferentes: el Teatro Real, donde presentarán los días 26, 27 y 28 la «Novena» de Beethoven; el ciclo Ibermúsica, en el Auditorio Nacional, con obras de Mahler, Berg y Mozart (día 30) y Schumann y Fauré (día 29). Programa este último que servirá para cerrar la gira y también la temporada del Palau de la Música Catalana el próximo 1 de julio.
Estos planes son, «desgraciadamente», muy distintos a los proyectados hace un par de años por el Real, en los que estaba previsto que dirigiera «La flauta mágica» de Mozart, con una puesta en escena de Robert Carsen (este sí se verá la próxima temporada). Sin embargo, los recortes han impedido que se produzca el ansiado debut operístico de la Filarmónica de Berlín en el foso del teatro madrileño.
«Con este minifestival nos gustaría devolver a Madrid todo lo que nos ofrece», explicó Simon Rattle, que apareció ante la prensa muy abrigado y completamente vestido de negro. «El Teatro Real ha sido increíblemente generoso, honrado y honesto al decirnos que no se podía hacer este proyecto que teníamos para tres años y que incluía tres óperas» (lo completaba «Parsifal» y «Carmen»), admitió el director británico que finalmente se decantó, junto con el director artístico del Real, Gerard Mortier, por sustituir la ópera de Mozart por la «Novena» de Beethoven (los tres conciertos costarán 750.000 euros, frente al millón y medio que hubieran tenido que desembolsar por «La flauta mágica»).
En directo en la plaza de Callao
«Nos preguntamos qué es lo que podíamos hacer utilizando el coro del Real y los cantantes que ya estaban contratados -Camilla Tilling, Nahtalie Stutzmann, Joseph Kaiser y Dmitry Ivashchenko- y Beethoven fue la respuesta pues la “Novena” tiene muchos elementos de “La flauta mágica”. Habla de la hermandad y a medida que va avanzando es tan luminosa como la música de Mozart. Además -añadió- va a ser proyectada en pantalla grande [el día 28 en la plaza de Callao, para celebrar los 25 años del hermanamiento entre Madrid y Berlín ], algo que me hace mucha ilusión». También se emitirá en directo por Radio Clásica y en el Palco Digital del coliseo madrileño.
Rattle, que ya ha realizado un ensayo con el Coro Titular del Real, elogió su calidad: «Tiene grandes voces profesionales y al mismo tiempo mantiene la frescura de las agrupaciones amateur». Y cerró este capítulo lamentado «no haber podido dirigir ópera aquí pero la vida es muy larga».
«Con la crisis, proyectos que tardan años en ser construidos se caen en pocos minutos»
El director británico que lleva más de una década al frente de la Filarmónica de Berlín, formación que abandonará en 2018, aseguró que su decisión de no renovar «no tiene nada que ver» con la salida de la orquesta del Festival de Salzburgo.
Mejor irse pronto que tarde
«Yo no soy el presidente de los Estados Unidos. Y cuando acabe mi contrato llevaré en Berlín lo que equivaldría a cuatro legislaturas presidenciales. De los sitios es mejor irse pronto que tarde. Y cuando lo haga llevaré 16 años y tendré 64 años». Confesó también que echará «un 111% de menos» a la formación germana, en cuyas filas hay músicos de 27 nacionalidades, entre ellas la española, representada por el viola Joaquín Riquelme.
«La selección de los músicos en la Filarmónica no tiene que ver con su procedencia sino con el tipo de intérprete que es. No queremos músicos que hagan un “servicio”, pero sí a aquellos que ofrezcan lo mejor de sí». Por último, Rattle lamentó no haber tenido tiempo para ensayar alguna obra de Robert Gerhard, «un compositor mitad alemán, mitad español. Lo haré la próxima vez», prometió.