16/10/2004 |
Visitan nuestro país dos importantes pianistas de esta hora. Son Nikolai Luganski, (Moscú, 1972) y Grigori Sokolov (San Petersburgo, 1950). Aquél, alumno de la histórica Tatiana Nikolaieva, un deslumbrante niño prodigio en sus primeros tiempos, ha aprendido ya a serenar su flujo sanguíneo y a templar sus modos. Ofrece un bello programa Chopin-Prokofiev en el ciclo Grandes Intérpretes de Madrid, el próximo martes. Éste, de camino más lento hasta adquirir popularidad en occidente, pese a ser ganador, a los 16 años, del Concurso Chaikovski, asombra por su infalibilidad y su seriedad de concepto. Se acerca a Mozart –el sublime Concierto nº 23– en un bello programa de la Orquesta de Granada dirigida por Víctor Pablo Pérez, en el que se incluyen también la obertura de La clemenza di Tito y la Sinfonía en do mayor de Wagner.
El Cultural