La soprano había nacido en Génova en 1957, se diplomó en canto y piano en el Conservatorio de Parma, especializándose más tarde en la prestigiosa Accademia Chigiana de Siena. En su rico repertorio había más de 70 títulos, desde Monteverdi a Prokofiev, pasando por el repertorio barroco y mozartiano hasta las interpretaciones de las heroínas de Verdi y Puccini.

Infinidad han sido las muestras de pésame, teniendo en cuenta que la soprano Dessì colaboró con los más grandes teatros, desde la Scala de Milán al Metropolitan de Nueva York, el Deutsche Oper de Berlin o el Staatsoper de Viena. En el 2014 interpretó la «Manon Lescaut» en el Liceo de Barcelona, con la dirección de Renato Palumbo y bajo la dirección escénica de Liliana Cavani. En España también cantó en el Teatro Real de Madrid y en el de La Maestranza de Sevilla (Turandot).

Dilatada y brillante fue su colaboración con los más prestigiosos directores de orquesta, entre ellos Claudio Abbado, Riccardo Chailly, Daniele Gatti, Gianluigi Gelmetti, Carlo Maria Giulini, Carlos Kleiber, James Levine, Lorin Maazel, Zubin Mehta, Riccardo Muti, Giuseppe Sinopoli y con realizadores igualmente del máximo nivel como Franco Zeffirelli, Roberto De Simone, Pier Luigi Pizzi, Luca Ronconi, Ettore Scola, Giorgio Strehler.

La Scala: «Páginas inolvidables»

La soprano Dessì vivía junto al lago de Garda y especialmente intensa ha sido su relación a lo largo de casi 30 años con la Scala de Milán, que la ha recordado con particular emoción en su mensaje de pésame a la familia: «Daniela Dessì ha presentado un amplio repertorio que, siguiendo la natural evolución de su voz, contó con interpretaciones desde Rossini a Mozart, Verdi y Puccini, con una técnica muy sólida que junto al fuerte temperamento y a una rara sensibilidad de interpretación la colocaron entre las figuras de más relieve en el panorama de la ópera internacional», afirma el comunicado de la Scala, que añade: «Su Fiordiligi en “Così fan tutte” y sus papeles verdianos con Ricardo Muti, así como sus interpretaciones de Puccini y Cilea permanecerán entre las páginas más inolvidables en la historia de la Scala de los últimos decenios».

«La Tosca soy yo»

Además de la Scala, la Fundación Pergolesi Spontini se deshace en elogios, calificándola de «artista generosa e inmensa, a la que recordaremos siempre llena de vida y de talento». De su vasto repertorio, Daniela Dessì tiene un personaje preferido: «Tosca». Al ser preguntada por la ópera que le gustaría cantar siempre, respondió sin dudarlo: «Tosca, porque me identifico con el personaje: Tosca soy yo». Tampoco tenía dudas sobre la cantante que más había admirado: «María Callas, por supuesto». Daniela Dessì le gustaba subrayar , entre sus principales virtudes, su «capacidad cuando canto para identificarme totalmente con el personaje». Apuntaba también tres requisitos para un gran cantante: «Paciencia, calma y serenidad. Si te inquietas, cantas mal».