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Desde hace años, casi décadas, siempre que se habla sobre los conciertos de música clásica sobrevuela sobre las conversaciones la sombra de la falta de público, y las causas de esta: educación musical deficiente, escasa inversión económica y ahora, especialmente, la crisis que hace mirar más el bolsillo. Esto ha provocado que disminuya el número de abonados y la venta de entradas en taqulla.

La Orquesta y Coro Nacionales de España no son una excepción, y por ello, su nuevo director técnico, Félix Alcaraz, ha puesto manos a la obra para buscar soluciones. En apenas seis meses, se incorporó al puesto el pasado mes de noviembre en sustitución de Ramón Puchades, se ha ocupado de diseñar no solo una programación musical, sino también de incrementar la oferta de actividades, gracias a la creación del ciclo «Satélites»: serie de conciertos de cámara a cargo de formaciones de viento, de cuerda, una agrupación barroca -proyecto liderado por Giovanni Antonini-, integrados por los músicos de la Orquesta Nacional de España. «Lo que permitirá potenciar su desarrollo artístico», indica Alcaraz.

A esto se suma la diversificación de los abonos -de bienvenida, viajeros, proximidad, corporativos, universitarios...-, así como la incorporación de descuentos en el precio de las entradas para jóvenes y colectivos con circunstancias especiales -desempleados-. «Nuestra obsesión es la captación de nuevos públicos y recuperar el perdido, algo común en otras instituciones», reconoció Alcaraz durante la presentación de la próxima temporada, en la que estuvo acompañado por el director general del Inaem, Miguel Ángel Recio. Para ello también ha diseñado una nueva imagen de marca para la formación, «renovada y fresca que sea reconocida, que sea identificada de manera singular y única».

Viaje a países lejanos

Además de estas iniciativas, también se pretende atraer a nuevos públicos a traves de la diversidad y el «equilibro» de su programación, cuyo eje temático el próximo curso será el de los viajes a países lejanos, que nos llevarán por los cinco continentes. Músicas como la de Ravi Shankar, interpretada por su hija Anoushka Shankar, sonarán junto a «Sherezade» de Rimsky-Korsakov; o la del pianista turco Fazil Say, con partituras de Mozart.

Pero además de las novedades, otro de los motores de este ambicioso viaje es la calidad de sus protagonistas. Así en el próximo curso debutarán en el podio de la OCNE directores de la talla de Kent Nagano, Christoph Eschenbach, Mikhail Pletnev y Fabio Luisi;y volverán las batutas de David Afkham, Simone Young, Semyon Bychkov y Ton Koopman. Tampoco faltarán batutas nacionales, como tres de sus antiguos titulares, Frühbeck de Burgos (concierto con el que celebrará su 80 aniversario), Josep Pons y Jesús López Cobos; y otros dos que están desarrollando una magnífica carrera internacional, Juanjo Mena y García Calvo. Estarán acompañadas por solistas como Janine Jansen, Jean-Yves Thibaudet, Joanquín Achúcarro, Javier Perianes y Juan Diego Flórez.

Repertorio español

En el capítulo de estrenos (entre los fines de la OCNE se encuentra los de promover y difundir el patrimonio español), pocos encargos: a Tomás Marco, Pilar Jurado; así como la recuperación de la ópera «Elena e Malvina» de Carnicer (que será registrada con el nuevo sello discográfico de la formación nacional), y la programación de repertorio actual, «que tras su estreno ha permanecido dentro de un cajón», de compositores como Sánchez Verdú, Martínez Burgos, Villa-Rojo, García Abril y Olavide.

La Carta Blanca estará dedicada en esta ocasión al compositor estadounidense John Adams, que estará arropado por el Cuarteto Attacca.

Entre los objetivos que se ha marcado Alcaraz se encuentran también el de potenciar las actividades pedagógicas, cuyos conciertos estarán dirigidos por jóvenes directores de orquesta españoles, como Jordi Bernàcer, Sergio Alapont y Andrés Salado; así como consolidar el capítulo de las grabaciones y continuar con las giras, que esta ocasión tendrá parada en Omán. La colaboración con otras instituciones, y la búsqueda de sinergias, ha desembocado en la organización de un concierto extraordinario con el ciclo Juventudes Musicales.