L'Europa musical al temps de Caravaggio
Excelente idea
19/11/2005 |
Acertadísima la idea del MNAC de organizar un concierto en torno a Caravaggio, cuya obra se exhibe ahora allí. Basta con ver la respuesta del público: el gran salón a rebosar. La resolución del programa estuvo a cargo de Savall, que ofreció con un pequeño grupo un concierto, en términos generales, impecable. Danzas italianas del renacimiento, música isabelina, piezas de Milán, Cabezón, Correa de Arauxo, y una bella improvisación sobre Canarios.
Músicas de la corte francesa de Luis XIII, del alemán Scheidt y, por fin, la coincidencia, si no temporal, sí estilística, en Les pleurs d' Orphée de Luigi Rossi. Y aquí se sitúa una de las claves del asunto: o se establece un mosaico de expresiones musicales con cierta fidelidad cronológica - esto fue el programa- o se trabaja - con mayor complejidad- desde perspectivas de estilo. Yen este sentido Caravaggio no supone una personalidad cortesana, su arte tiene más relación con el comienzo de la ópera. En estudios recientes, aún inéditos, se ha identificado a algún laudista en sus cuadros. El laúd es tan inherente a Caravaggio como la guitarra a Picasso y al cubismo. Y esto se echó de menos, salvo en las referencias a Dowland. El trabajo de Savall y su grupo fue, por lo demás, una muestra de sensibilidad.
Jorge de Persia
La Vanguardia